“El barrio sin coches que está revolucionando EE.UU.: ¿El futuro de las ciudades?”

En Arizona, un lugar dominado por el calor extremo y la dependencia total del automóvil, se levantó Culdesac, un vecindario que rompe todas las reglas del urbanismo estadounidense. Construido desde cero para ser 100% libre de autos, su diseño recuerda a los pueblos mediterráneos, con casas blancas, callejones estrechos, murales de colores y plazas llenas de vida.

Aquí los vecinos no necesitan coche: tienen tiendas, restaurantes, parques, gimnasio, coworking y hasta un mercado a pocos pasos. La movilidad está garantizada con bicicletas eléctricas, transporte público eficiente y hasta taxis autónomos. El resultado: una reducción drástica de emisiones contaminantes y un estilo de vida más saludable y comunitario.

Culdesac también desafía al desierto con arquitectura inteligente: edificios cercanos que generan sombra, paredes blancas que reflejan el sol y calles pensadas para el viento, logrando hasta 20 grados menos que el resto de Phoenix. El barrio vibra con negocios locales, conciertos al aire libre y un fuerte sentido de pertenencia entre sus habitantes.

Su éxito ya atrajo la atención de ciudades, gobiernos y desarrolladores en todo EE.UU., que ven en este experimento una posible respuesta al caos urbano y la crisis climática. Lo que parecía una utopía, hoy se siente como el primer paso hacia las ciudades del futuro: humanas, frescas y sin coches.