Pornhub pierde 77% de usuarios británicos tras ley de verificación de edad: millones recurren a VPNs

El gigante del entretenimiento para adultos Pornhub reportó una disminución del 77% en el número de visitantes del Reino Unido desde la implementación de las nuevas verificaciones de edad impuestas por el Online Safety Act (OSA), que obliga a los usuarios a demostrar que son mayores de 18 años mediante identificación facial u otros métodos.

Aunque la BBC no ha podido verificar las cifras, Google Trends muestra una caída del 50% en las búsquedas del sitio desde que la ley entró en vigor. Sin embargo, los expertos advierten que muchos británicos podrían seguir accediendo mediante VPNs, herramientas que ocultan la ubicación real del usuario.

Datos de Ofcom, el regulador británico, confirman que las visitas a sitios pornográficos bajaron un 30% en tres meses. La entidad aseguró que la medida está cumpliendo su objetivo principal: impedir que menores accedan fácilmente a contenido sexual explícito.

Según investigaciones de Cybernews, los descargadores de VPNs aumentaron a más de 10 millones en 2025, con un pico del 1,800% en descargas tras la entrada en vigor de la norma. Esto indica que parte del tráfico “perdido” de Pornhub podría haberse redirigido o “reclasificado” como tráfico internacional.

La ejecutiva Alex Kekesi, de Aylo, empresa matriz de Pornhub, calificó las nuevas reglas de “inaplicables”, afirmando que Ofcom enfrenta un reto imposible al intentar regular más de 240 mil plataformas. Aseguró además que varios sitios que ignoran la ley están viendo crecimientos exponenciales de tráfico.

Por su parte, Ofcom defendió su labor y recordó que las principales 100 páginas para adultos ya aplican controles de edad, cubriendo más del 75% del tráfico total. El Gobierno británico respaldó las medidas, enfatizando que proteger a los menores en línea sigue siendo una prioridad nacional.

Kekesi sugirió que la verificación debería realizarse a nivel de dispositivo y no por sitio web, mientras que otros expertos, como Ian Corby y Chelsea Jarvie, señalaron que ninguna medida es infalible y que se requiere una combinación de controles digitales para garantizar la seguridad online.