Pritzker pide suspender redadas migratorias en Chicago por Halloween; el DHS lo acusa de “difundir mentiras”
- Periodista

- hace 1 día
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El gobernador de Illinois, JB Pritzker, pidió al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y a altos funcionarios de ICE suspender las redadas migratorias en Chicago durante el fin de semana de Halloween, argumentando la necesidad de garantizar la seguridad de las familias y los niños durante las celebraciones.
La solicitud se produjo tras un incidente en el vecindario de Old Irving Park, donde agentes federales habrían lanzado gas lacrimógeno durante un desfile infantil. En una carta obtenida por el Chicago Sun-Times, Pritzker pidió detener las operaciones del viernes al domingo en escuelas, parques, iglesias, hospitales y viviendas, calificando la medida como una “pausa humanitaria”.
“Ningún niño debería inhalar gas lacrimógeno mientras pide dulces en su propio vecindario”, escribió el gobernador.
El DHS respondió con dureza, acusando a Pritzker de “difundir mentiras” y de “manipular la narrativa” sobre las redadas. Tricia McLaughlin, vocera de la agencia, declaró a Newsweek que el gobernador “está atacando a los agentes que arriesgan su vida para limpiar el crimen que él mismo permitió”.
Chicago se ha convertido en uno de los principales focos del debate nacional sobre inmigración y deportaciones, mientras continúa la polémica “Operación Midway Blitz”, que ya suma más de 1,800 detenciones y múltiples denuncias por uso excesivo de fuerza.
En paralelo, la Corte de Apelaciones del Séptimo Circuito suspendió parcialmente la orden que obligaba al funcionario de la Patrulla Fronteriza Gregory Bovino a rendir informes diarios sobre las operaciones en la zona. Sin embargo, las restricciones al uso de gas lacrimógeno y la obligación de usar cámaras corporales permanecen vigentes, por decisión de la jueza Sara Ellis, quien supervisa una demanda por abuso de autoridad contra agentes federales.
Pritzker insistió en que su petición se basa en la antigua guía del DHS que protegía las llamadas “ubicaciones sensibles”, eliminada por la actual administración.
“Esa política debería restablecerse para proteger a los niños y garantizar que las familias puedan acceder a educación y atención médica sin miedo”, afirmó.
El DHS, en respuesta, aseguró que sus oficiales solo usan métodos de control “como último recurso” y acusó a los políticos locales de “sembrar miedo con fines partidistas”, mientras las tensiones por la política migratoria siguen aumentando en vísperas de Halloween.








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