Cumbre del G7 marcada por ausencia de Trump y choques sobre Irán y Ucrania
- Redacción

- 17 jun
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Seis de los siete líderes del G7 concluyeron su cumbre en Canadá en medio de crecientes tensiones globales y la sorpresiva salida anticipada del presidente estadounidense Donald Trump. Aunque el encuentro tenía como objetivo abordar conflictos urgentes como la guerra en Ucrania y el programa nuclear iraní, las divisiones entre los líderes quedaron en evidencia.
Trump abandonó la cumbre un día antes, restando importancia a las reuniones restantes y asegurando que ya había hecho “todo lo necesario”. Su partida se dio en el contexto de una nueva escalada entre Israel e Irán, conflicto sobre el cual Trump pidió la “evacuación inmediata” de Teherán, pero evitó hablar de una posible intervención militar de EE.UU.
Pese a las diferencias, los líderes lograron emitir una declaración conjunta que afirma que Irán no debe obtener armas nucleares y que se requiere una desescalada en Medio Oriente, incluyendo un alto al fuego en Gaza.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, se unieron a la cumbre para buscar apoyo frente a la guerra en Ucrania. Sin embargo, Trump se mostró escéptico ante nuevas sanciones contra Rusia y evitó comprometerse, a diferencia del resto del grupo.
En paralelo, Trump reforzó sus posturas proteccionistas, destacando los altos aranceles ya impuestos a socios comerciales y anunciando un nuevo marco comercial con el Reino Unido.
El portavoz del Kremlin calificó al G7 como un grupo “pálido e inútil” en comparación con foros como el G20, reflejando el escepticismo internacional sobre la capacidad del G7 para liderar en un escenario global cada vez más fragmentado.








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