ICE detiene a niño brasileño de 13 años tras alerta escolar en Massachusetts; indignación entre activistas

Un niño brasileño de 13 años fue detenido por la policía de Everett, Massachusetts, luego de que las autoridades recibieran una alerta de que portaba un arma mientras se dirigía a su escuela secundaria Parlin Junior High.

El alcalde Carlo DeMaria y el jefe de policía Paul Strong informaron que los agentes registraron al menor y hallaron un cuchillo, evitando lo que, según dijeron, “pudo haber sido una tragedia”. El adolescente fue acusado de posesión de un arma peligrosa.

Sin embargo, tras su arresto, el sistema de identificación de huellas AFIS notificó automáticamente a Inmigración y Control de Aduanas (ICE), cuyos agentes llegaron antes de que el joven pudiera ser entregado a su madre, quien ya se encontraba en la estación de policía. El menor fue trasladado a un centro de detención en Virginia, a cientos de kilómetros de su hogar.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) alegó que el menor tenía “antecedentes violentos” y que estaba en posesión de un arma de fuego además del cuchillo, aunque el jefe Strong negó la existencia de un arma de fuego y se abstuvo de confirmar cualquier historial criminal debido a su edad.

El abogado de inmigración Andrew Lattarulo, quien representa a la familia, declaró que el menor no tiene condenas previas y que ICE actuó de forma desproporcionada al sacarlo del estado sin proceso judicial. “Si realmente fuera tan peligroso, ¿por qué la policía iba a liberarlo con su madre?”, cuestionó.

Lattarulo también explicó que los padres del menor poseen permisos de trabajo y que el joven los ha estado ayudando con su caso de asilo. Presentó una petición de hábeas corpus para evitar su traslado, pero ICE ya lo había ejecutado antes de la audiencia.

El abogado describió al niño como “muy triste y angustiado” tras hablar con él en el centro de detención, destacando el impacto emocional de la separación familiar.

Mientras tanto, la policía local afirmó que no colabora directamente con ICE en labores migratorias, aunque mantiene comunicación con agencias federales “cuando es necesario”.

La comunidad inmigrante de Everett respondió con una manifestación frente al Ayuntamiento, exigiendo la liberación del menor y denunciando el uso de la detención migratoria contra un niño.